El Tribunal apreció cierta rigidez en su mirada, una arruga en su frente y unas canas nacientes. Los tres jueces se miraron entre ellos y estuvieron de acuerdo: no daba la talla. De poco sirvieron sus estudios y experiencia, con esa pinta pocos discos iba a vender.
Finalmente eligieron al guaperas, ¿la voz? Ya se apañarían los técnicos de sonido.
Finalmente eligieron al guaperas, ¿la voz? Ya se apañarían los técnicos de sonido.
Hola Mel, lo prometido es deuda y leo tus micros en cadena, y parece que seguimos unidas por estos eslabones de letras. Me gustan tus guiones, todosss, el 1º, mucho.
ResponderEliminarUn abrazo GRANDE.
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